El hombre es el único animal qnecesita escribir su historia para poder recordarla. Cuando nace no sabe absolutamente nada. Moriría si no aprendiera a vivir. La raza humana es la única en la naturaleza qno transmite ninguna informacion innata qvaya más allá de lo puramente genético. Carece de aunténticos instintos. No durará mucho.
Porque ¿Quién escribe la historia? Nunca los vencidos, los despojados, los sometidos. Por eso, por ejemplo, las guerras dejan en la memoria colectiva un poso en el que se adivina el inconfundible sabor de la victoria: esfuerzo con recompensa, sufrimiento con premio, dolor qtermina, que se olvida.
¡Qué distinta hubiera sido la historia de la humanidad si sólo se hubiera escuchado a los perdedores!
Roberto Iniesta.
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